¿Por qué todo el mundo habla de Storytelling?

¡Hola! ¿Cómo estás? Espero que muy bien. Hoy quiero hablar sobre el tema que ocupó gran parte de los contenidos de mi cuenta de Instagram el mes pasado, el tan mencionado: Storytelling. Parece que todo el mundo habla sobre que tu marca debe tener un buen Storytelling y puede resultar un concepto un tanto confuso. Por eso es que hoy me gustaría poder explayarme un poco sobre esto.

En primer lugar, no debería haber tanto ruido en torno a un concepto que se traduce como «el arte de contar historias». Sí, eso es lo que significa Storytelling. Las historias nos acompañan desde nuestro origen como seres humanos. Son algo así como un pegamento social que nos ha llevado alrededor del fuego, que nos han alimentado el corazón y la imaginación mientras hacíamos guardia por miedo a los depredadores del Neolítico.

En primer lugar, no debería haber tanto ruido en torno a un concepto que se traduce como «el arte de contar historias»

Lorena Santa Cruz

Pensá en las historias como en una anécdota, un chisme, una noticia, una hazaña…¡Hay tantos tipos de historias! Y ahora decime ¿estás en contacto con alguna de estas historias a diario? ¡Seguro que sí! Los seres humanos somos seres sociales y también somos animales, solo a que a diferencia del resto de los animales tenemos la capacidad de utilizar el signo para comunicarnos. El signo es algo que está en lugar de otra cosa, por ejemplo las palabras. Una palabra como «computadora» designa al objeto computadora. Sin embargo, la palabra «computadora» es arbitraria, cuando nacimos ya existía. Si no fuera así no podríamos comunicarnos y entendernos.

Cuando en la antigüedad dimos forma al lenguaje, con sus consensos, reglas, etc. las historias ya existían. Seguro recordarás las cavernas con dibujos pintados en las paredes. Éstos generalmente cuentan historias, ya sean de caza, de dioses, de hazañas. Se puede rastrear en estas pinturas los orígenes del cómic.

En segundo lugar, las historias nos formaron. Seguramente leíste o te leyeron algún cuento infantil como Caperucita Roja, la Cenicienta, Blancanieves, Hansel y Gretel. Esos cuentos son muy muy antiguos y se conocen hace cientos de años, incluso es muy difícil rastraer su origen, porque como sabrás muchas historias se transmitían oralmente. También recordarás que esos cuentos tenían una moraleja, por ejemplo el de Caperucita Roja no desobedecer (a ella le habían dicho que no pasara por el bosque porque allí vivía un lobo feroz). La moraleja es una moral que se transmite por medio de cuentos a niñas y niños, es una forma de enseñarles, en este caso, que los bosques son peligrosos, que no se deben alejar del grupo, que el mundo puede ser peligroso, etc.

En tercer lugar, como el Storytelling es un arte, para narrar bien hay que tener ciertas habilidades. No es suficiente que podamos contar como fue nuestro día para ser hábiles a la hora de transmitir algo a nuestro público. Hay algunas reglas propuestas por varias teorías que nos ayudan a organizar mejor el discurso. Si sos una mente analítica habrás notado que muchas películas de Hollywood son previsibles, más de una vez habrás comentado: «y ahora se salva y vuelve a pelear con el enemigo y le gana». Bueno, es porque siguen un método. Hollywood es bastante previsible, no arriesga mucho porque sabe que su fórmula funciona.

Como el Storytelling es un arte, para narrar bien hay que tener ciertas habilidades. No es suficiente que podamos contar como fue nuestro día para ser hábiles a la hora de transmitir algo a nuestro público.

Lorena Santa Cruz

Algunas fórmulas que te ayudan a contar una historia:

-La Retórica antigua, propuesta especialmente por Aristóteles es para mí la mejor teoría del Storytelling. Sin embargo, yo sé que es muy compleja y difícil de comprender por su terminología. Voy a simplificarla al extremo para transmitirte lo que considero que te puede ayudar: cuando querés contar algo a tu público en redes sociales necesitás apelar a la razón y a la emoción. Por ejemplo, querés que te compren tu servicio y/o producto y vas a necesitar convencerlo racionalmente de que es muy bueno (no tiene parabenos, protege el ambiente, no está testeado en animales, te ayuda a relajarte) y por otro lado tenés que apelar a la emoción, tu público necesita empatizar con vos como marca, puede que le cuentes la historia de tu emprendimiento, que le muestres en una Story de Instagram todo el amor que le ponés al proceso. Recordá: convencer y conmover. Si no me creés, mirate un discurso político o una publicidad.

Cuando querés contar algo a tu público en redes sociales necesitás apelar a la razón y a la emoción.

Lorena Santa Cruz

-El viaje del héroe: Joseph Campbell fue un experto en mitos que investigó durante años qué tenían en común los mitos de diferentes pueblos del mundo. Él halló un sistema que más o menos se repetía en las mayorías de las historias, al que denominó “El viaje del héroe” (les recomiendo fuertemente el libro del mismo nombre). Se trata de unos pasos que siguen la mayoría de las historias y de personajes arquetípicos que existen en casi todas las sociedades. Si les interesa, háganmelo saber en comentarios y escribo un post específico sobre esto. Les comparto a continuación un esquema que lo resume visualmente. Como ejercicio les propongo que tomen cualquier película, cuento, libro que se les ocurra y piensen el esquema basado en el/la protagonista de la historia. Es la fórmula Hollywood que les conté más arriba. De hecho, George Lucas contrató a Campbell para que lo ayude a desarrollar los personajes de Star Wars, háblame de éxito.

-La historia y el relato: Una historia puede ser muy buena en sí misma pero si no está bien contada, de seguro no va a tener tanto impacto. Por eso, muchas teorías identifican dos niveles: la historia que es el tema, por ejemplo: una nena debe llevarle comida a su abuela, etc. Y el nivel del relato en donde esa misma historia tiene una introducción (generalmente se presenta la situación y a los personajes), después de esto hay un quiebre, si siguiéramos a Campbell podríamos hablar de un llamado a la aventura, aquello que hace que nuestro protagonista salga de su mundo corriente, luego hay un desarrollo donde van apareciendo problemas, otros personajes, un clímax que es aquel momento donde empezamos a hinchar por nuestro héroe y le gritamos: “¡Caperucita, date cuenta, es el lobo, no es tu abuela!” y luego viene un desenlace en donde todo vuelve a la normalidad pero nuestro héroe cambió, es mejor, tiene nuevas habilidades, se dio cuenta de su potencial, etc. Cuando vayas a contar una historia seguí los pasos: introducción, nudo (desarrollo) y desenlace.

“¡Caperucita, date cuenta, es el lobo, no es tu abuela!”

El tema del Storytelling da para largo. En este post te quise presentar un poco más desarrollado el origen del concepto y de qué se trata. Generalmente cuando lo cuentan expertos en Marketing te van a dar 3 tips para escribir en las redes. Mi idea es profundizar un poco más y llevarte a los orígenes del concepto y que tengas mejores herramientas para tomar la decisión de utilizar las historias a tu favor.

Como sabés, hoy en día el concepto está sobreexplotado. Yo creo que las historias son fantásticas y pueden ser un gran complemento de tu emprendimiento, pero no lo pueden ser todo, a menos que se te dé muy bien el tema. No todo puede ser Storytelling, no todo se puede narrar como Caperucita, pero sí muchas cosas. Y como habrás visto, las historias son muy importantes para nuestra humanidad. Decime ¿qué historia te estás contando a vos mismx? ¿Es una historia de éxito y aprendizaje? ¿En qué parte del camino del héroe estás hoy? Espero que te cuentes la mejor historia y que la recompensa sea enorme. ¡Hasta la próxima!

Comunicación+Yoga=Infinita

El mes pasado reactivé una cuenta de Instagram que había dejado de utilizar hacía más o menos cinco años. En aquel entonces formaba parte de dos emprendimientos además de mi trabajo formal. Había iniciado una consultoría en comunicación y trabajé acompañando a una marca de diseño, a una banda muy reconocida y a un boliche bastante popular en el crecimiento de sus redes sociales. Entonces, me llegó la propuesta de asociarme con una chica que conocía y crear un emprendimiento en el que yo me encargaría de la estrategia y gestión y ella del aspecto comercial de distintos negocios en internet. La experiencia no colmó mis expectativas y decidí continuar sola mi camino, aunque al poco tiempo me dediqué exclusivamente a mi trabajo formal y a la investigación en la universidad.

Durante la cuarentena estuve pensando mucho en mi propósito como comunicadora social. Me cuestioné bastante acerca de si había logrado mis objetivos como profesional y si bien he hecho cosas muy satisfactorias profesionalmente no dejaba de sentir que había mucho más que podía brindar. Cuando el año pasado comencé a estudiar yoga, me movilizó mucho el tema del propósito y de cómo lograr unir lo que sentía que era mi misión como comunicadora social y como partícipe de un camino de mejora personal.

Como me sentía un poco trabada con toda la situación me metí a hacer un curso virtual de Ikigai. Ya les contaré un poco sobre este tema, es fascinante. En japonés significa algo así como «la razón de ser», sería encontrar aquello que nos colma, que nos hacía fluir, en lo que somos buenxs y por lo que además podemos ganar dinero. En el curso nos planteaban un ejercicio de visualizar nuestro Ikigai y anotar una serie de 20 pasos para concretarlo. Realmente parecía que nada estaba fuera de mi alcance. Pero lo que más me llegó fue el ejercicio de anotar conceptos que nos definen (aunque no tengan nada que ver entre sí) y luego mezclarlos y ver qué podemos hacer con eso. Yoga+Comunicación apareció como un manifiesto.

Entonces pensé en qué podía hacer para ayudar a las personas a encontrar herramientas de bienestar, qué podía aportar yo para llevar a la gente aquello que las hiciera sentir mejor. Y ahí fue cuando surgió la idea de retomar Infinita. Cuando surgió la propuesta de Infinita, hace cinco años, desde el nombre hasta la identidad visual de esa época estaba atravesada por una búsqueda espiritual. Si bien pueda sonar raro, esa idea se terminó materializando en un momento mejor.

Finalmente, Infinita volvía para ofrecer herramientas digitales a emprendedoras y emprendedores del mundo del bienestar. Es mi pequeño aporte a la mejora del mundo. Estoy convencida de que estamos en una nueva frecuencia en el planeta y un cambio de mentalidad es inminente. Nuestra Tierra nos pide a gritos de dolor que cambiemos, que seamos mejores seres, que cuidemos nuestro aire, nuestro suelo, que mejoremos nuestra alimentación. Hay una vuelta a la naturaleza que es necesaria y necesitaremos de todas aquellas personas que se están ofreciendo para facilitarnos el camino a lxs demás. Mi aporte es potenciar sus mensajes a través de los canales digitales. Y si bien, como comunicadora social profesional puedo hacerlo sobre cualquier tema, este es un tema que me convoca especialmente porque inicié ese camino hace años.

Lxs invito a sumarse a la comunidad de Infinita. Durante julio estuve compartiendo información sobre Marketing digital y durante agosto sobre Storytelling. Pueden acompañar este emprendimiento en Instagram y Facebook y participar en el feed y en historias. Como verán también decidí reactivar este blog, así que pronto comenzaré a compartir información que complemente los temas de los que hablo en las redes sociales. ¡Bienvenidxs! Muchas gracias por leer. Hasta la próxima.